"¿Quién te dijo que la vida era fácil? Siempre hay dolor y esfuerzo. Tendrás que enderezar el eje si eso es lo que se requiere. Deja de lamentarte y levántate de una vez. Te las has arreglado para vivir huyendo, pero no se puede correr siempre. En algún momento hay que parar y enfrentarse consigo mismo. Por mucho que corras, siempre estás dentro de la misma piel..."